Construir una pequeña situación sin futurola internacional situacionista : de la liquidación del arte a la crítica revolucionaria de la vida cotidiana

Resumen

La tesis pretende demostrar la especificidad de la Internacional Situacionista en el panorama de los años cincuenta y sesenta, en una doble vertiente: tanto en la práctica artística vanguardista como en el revisionismo marxista de la época (incluyendo la nueva izquierda americana, el gauchisme francés y el llamado marxismo occidental, con autores como Lefebvre, Goldmann, Marcuse, etc.). Para ello se han preferido utilizar como fuentes fundamentales los propios escritos del grupo: utilizando materiales de primera mano se intenta evitar tanto las interpretaciones interesadas como los prejuicios y las ideas más superficiales que a menudo se manejan a propósito de un grupo tan sensible a los estereotipos como la I.S. El trabajo se abre con un estudio de los precedentes más señalados, entre los cuales destacan, además de los referentes del dadaísmo (especialmente el berlinés) y del surrealismo (especialmente en su particular versión belga), el grupo COBRA, el Letrismo de Isidore Isou, el Movimiento Internacional para una Bauhaus Imaginista (de Asger Jorn) y, por supuesto, la Internacional Letrista. El posterior recorrido por la historia de la I.S. irá mostrando su evolución desde las tesis vanguardistas de la liquidación/superación del arte, y a través de un período de grave polémica entre sus sectores artísticos y político, hasta la conversión en un grupo decidida y declaradamente político y revolucionario. Una perspectiva que desde mi punto de vista está presente desde los orígenes mismos del grupo y que casi a la fuerza tenía que acabar imponiéndose (dado además el peso que la figura de Debord tiene en el grupo desde el principio y que irá haciéndose cada vez más considerable). Con esta perspectiva y ante la radicalidad de los planteamientos, puede llegar a ponerse en duda el carácter situacionista de la actividad artística de Gallizio y Jorn. Finalmente, y tras relativizar la importancia de los movimientos de ocupación del mayo '68 para la significación y validez de la teoría situacionista (la participación del grupo en las jornadas revolucionarias es indudable e incluso destacada), se hace un repaso y análisis de la eclosión de la moda pro-situ (tanto en Europa como en Estados Unidos, caracterizada sin embargo por un bajísimo nivel respecto de la I.S.) y se apunta la relación innegable del situacionismo con el posmodernismo.