Eficacia del programa de inteligencia emocional intensivo (PIEI) en la inteligencia emocional y conducta prosocial de alumnos de la ESO

  1. Rodríguez García, Gustavo Adolfo
Dirixida por:
  1. Manuel Antonio Férreo Cruzado Director
  2. Juan Fernández Sánchez Director

Universidade de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 10 de decembro de 2018

Tribunal:
  1. María José Díaz-Aguado Jalón Presidente/a
  2. Javier Martín Babarro Secretario/a
  3. Miguel Ángel Carbonero Martín Vogal
  4. José Antonio Fuertes Martín Vogal
  5. Elena Pérez Hernández Vogal

Tipo: Tese

Resumo

El desarrollo de la Inteligencia Emocional (IE) en la escuela se asocia con la reducción de problemas de conducta, la disminución del bullying y un menor consumo de sustancias adictivas, a la par que con una manifiesta ganancia en el rendimiento académico, la mejora de la relación maestro-alumno, el aumento de la Conducta Prosocial (CP) y un mayor bienestar. La bibliografía especializada manifiesta además que la IE es susceptible de ser desarrollada a través de programas específicos de intervención a lo largo de las distintas etapas del ciclo vital. Existen diversos programas para adolescentes, pero muy pocos han sido evaluados, especialmente en España. Objetivos: Adaptar, aplicar y evaluar un nuevo Programa de Inteligencia Emocional Intensivo (PIEI) para adolescentes. Comprobar la relación existente entre la IE y la CP. Estudiar cómo afectan la edad y el sexo a la IE y a la CP. Método: El estudio se realizó en un grupo de 207 estudiantes de la ESO de Madrid (105 varones y 102 mujeres), de entre 12 y 17 años (grupo cuasiexperimental, n = 104; grupo control, n = 103). Se administraron dos instrumentos de evaluación antes y después de implementar el programa, así como en el seguimiento, 6 meses después de concluir la intervención: el cuestionario TMMS-24, que evalúa los componentes de la Inteligencia Emocional Percibida (IEP; Atención, Claridad y Reparación), y el TISS, que evalúa la CP. Resultados: No se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre el grupo control y el cuasiexperimental, en situación pretest, en ninguna de las variables de estudio, tal y como se esperaba. Los análisis de covarianza pretest-postest sí mostraron diferencias estadísticamente significativas, con un tamaño del efecto entre pequeño y mediano, a favor del grupo experimental, en todas las variables, excepto en Claridad, donde las diferencias no fueron estadísticamente significativas. En el seguimiento estas diferencias prácticamente desaparecieron en las variables de la IEP, pero se mantuvieron intactas en la CP, con un tamaño del efecto mediano. La IEP mostró una alta correlación con la CP. Las chicas tuvieron mayores puntuaciones en Atención, los chicos en Claridad y Reparación, no habiendo diferencias estadísticamente significativas en la CP. Tampoco hubo diferencias con respecto a la edad ni en la IEP ni en la CP. Conclusiones: Los resultados, en líneas generales, son coherentes con los obtenidos en los programas extensivos, por lo que el PIEI, además de ampliar la escasa lista de programas evaluados, aporta un nuevo formato disponible en el ámbito nacional e internacional de gran utilidad para los centros educativos, dada su brevedad y relativa eficiencia. En futuras investigaciones se debería reforzar el programa para hacer que los efectos positivos que el PIEI ha tenido sobre la IEP al acabar el programa, se mantengan a medio plazo. No obstante, el programa ya en la actualidad ha causado un impacto relevante en toda la comunidad educativa del colegio. Sería conveniente incluir en próximos estudios las variables que los resultados cualitativos han mostrado como potenciales fortalezas no esperadas del programa. El presente estudio ayuda a justificar, más si cabe, la ya reconocida necesidad de la inclusión de la IE en el ámbito de la escuela.