Papel de la citogenética y de la genética molecular en la detección de la clonalidad en las eosinofilias
- Arefi Arefi, Maryam
- J. L. García Hernández Director
- Jesús María Hernández Rivas Director
Universidade de defensa: Universidad de Salamanca
Fecha de defensa: 21 de xullo de 2014
- Consuelo del Cañizo Fernández-Roldán Presidente/a
- J. R. González Porras Secretario/a
- Felipe de Arriba de la Fuente Vogal
- M. Teresa González Martínez Vogal
- María Jesús Peñarrubia Ponce Vogal
Tipo: Tese
Resumo
[ES]La presencia de eosinofilia crónica es un hallazgo poco frecuente, pero de gran relevancia clínica. Para su correcto enfoque diagnóstico y terapéutico es importante definir un algoritmo clínico en el que se deben incluir el estudio de las alteraciones de los genes BCR, ABL1, JAK2, PDGFRA, PDGFRB y FGFR1, así como descartar la presencia de clonalidad T. Las hemopatías mieloides y linfoides con reordenamientos de los genes PDGFRA o PDGFRB son enfermedades poco frecuentes, pero no excepcionales. Es difícil determinar su incidencia en nuestro medio, pero podríamos estimarla en torno a 0,1/100.000 habitantes/año. Las NMP con fusión FIP1L1-PDGFRA son el 2,2% de todas las NMP, mientras que la incidencia de las NMP con reordenamiento del gen PDGFRB se sitúa en torno al 1,8% de todas las NMP. Los enfermos con fusión PDGFRA/FIP1L1 se caracterizan por ser varones de edad media, con hepatoesplenomegalia y a nivel biológico tienen leucocitosis con eosinofilia, anemia y trombopenia. En nuestra serie, todos los enfermos tratados con imatinib a 100 mg/d respondieron al tratamiento y han mantenido la respuesta durante años. Los enfermos con reordenamiento del gen PDGFRB suelen ser varones, de edad avanzada y a nivel biológico destaca la presencia de anemia y leucocitosis con eosinofilia. La alteración citogenética más frecuente es la t(5;12), con fusión de los genes PDFGRB y ETV6. En ocasiones los enfermos con reordenamientos de PDGFRB tenían pérdidas de 5q asociadas. En nuestra serie, la mayoría de los enfermos tratados con imatinib respondieron a una dosis de 400 mg/d y la respuesta se ha mantenido en la mayoría de ellos.La aplicación de los microarrays genómicos al estudio de las eosinofilias crónicas permite la detección de alteraciones cromosómicas en el 76% de los pacientes con enfermedades mieloproliferativas. Las alteraciones más frecuentes son las pérdidas genéticas, fundamentalmente en 20q13.13 y 11q13.3. Los enfermos con reordenamiento del PDGFRA tenían pérdidas en 19p13.11, mientras que en la leucemia mieloide crónica son frecuentes las pérdidas en 8q24.3. Estos cambios no se observan de los enfermos con eosinofilia asociada a LNH-T ni en las eosinofilias reactivas.