El pintor Stolz Viciano

  1. Enjuto Castellanos, Esther
Dirigida por:
  1. Francisco Javier Pérez Rojas Director/a

Universidad de defensa: Universitat de València

Fecha de defensa: 11 de febrero de 2004

Tribunal:
  1. Francisco Javier de la Plaza Santiago Presidente
  2. José Luis Alcaide Secretario/a
  3. Alfonso Pleguezuelo Hernández Vocal
  4. Cristóbal Belda Navarro Vocal
  5. Javier Barón Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 96694 DIALNET lock_openTDX editor

Resumen

Ramón Stolz Viciano (Valencia 1903-1958) es el autor de una obra extraordinaria tanto en calidad como en cantidad, muy poco conocida para el público en general y para la crítica de arte en particular debido a la práctica ausencia de bibliografía sobre el tema y también a las escasas exposiciones realizadas sobre su obra. Especialista en la técnica del fresco, una técnica en progresivo desuso desde el siglo XVIII, es autor también de una ingente producción al óleo. Stolz Viciano destaca también como dibujante excepcional, y en opinión de su amigo el profesor Enrique Lafuente Ferrari, sus dibujos tienen pocos rivales entre los de cualquier artista español del presente o del pasado. En esta tesis se presenta un catálogo razonado de su obra mural, de caballete y dibujos. Stolz Viciano destaca también como pintor de oficio. Sus conocimientos técnicos sobresalen sin duda ya que eran muy pocos los que podían por entonces pintar al fresco, una técnica en progresivo y práctico desuso. Estos conocimientos, adquiridos de forma autodidacta con la práctica constante que favorecía su talante disciplinado y su afán experimentador, se vieron reforzados con sus trabajos como restaurador de todas las cúpulas al fresco del Pilar de Zaragoza, además de la reconstrucción integral de una de Francisco Bayeu y de la parte arruinada de la de Palomino, en la Basílica de la Virgen de los Desamparados de Valencia, entre 1940 y 1941. Desde su puesto como profesor en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Prácticas de ornamentación primero -desde 1932- y después desde la cátedra de Procedimientos artísticos ganada con el número uno en 1943, intentó inculcar a varias generaciones de pintores la necesidad de aprender la técnica, de manejar el oficio, una herramienta imprescindible que, lejos de coartar la espontaneidad o comprometer la personalidad, como no se cansaba de repetir, es el único medio que permite al pintor expresar su pensamiento con formas y colores. De la Academia de la Escuela fue elegido también Académico en febrero de 1958, unos meses antes de su muerte, ocasión en la que se publicó el volumen de los Discursos leídos con motivo de la recepción como académico de Don Ramón Stolz Viciano el 23 de febrero de 1958. En este libro se describe a un artista especialista en la técnica del fresco, dedicado a grandes trabajos de solemne inspiración histórica y religiosa. Ramón Stolz era indudablemente especialista en la técnica del fresco y, en opinión una vez más de Lafuente Ferrari, el mayor fresquista español desde Lucas Jordán. La envergadura de los encargos que recibió a lo largo de su vida (Capilla de la Comunión en la Basílica de los Desamparados de Valencia, Iglesia del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en Madrid, Gobierno Civil de Santander, la cúpula sobre la Via Sacra del Pilar o la gran cúpula del Monumento a los Caídos en Pamplona entre otras) revelan un reconocimiento de sus clientes que no se ajusta al desconocimiento generalizado de su producción. Pero Stolz no se dedicó en exclusiva a la pintura mural. También pintó mucho (y muy bien) al óleo. Las visitas a familiares y amigos permitieron el descubrimiento de un ingente número de óleos y dibujos de los que no existía absolutamente ninguna relación y que desvelan su faceta más mundana y sensual o su preferencia por la mujer, manifiesta en los bellos desnudos o cuadros de tema mitológico, y también en sus cuadros de género, en los que destacan sus elegantes valencianas; o su habilidad como retratista o como pintor de bodegones. En esta obra resulta llamativo el contraste no sólo en los temas sino en la concepción e incluso estilo frente a los grandes ciclos murales, un contraste que se ha pretendido entender y explicar en el presente trabajo, mediante la puesta en relación de su obra con la de otras corrientes coetáneas o del pasado y el análisis de sus escritos sobre el oficio y la técnica pictórica. ------------------------------------------------------------------Ramón Stolz Viciano (Valencia 1903-1958) was a painter almost unknown both to the general public and to the specialised critics, due to the scarcely existant bibliography as well as to the few exhibitions of his works. His life work is astonishing in terms of amount and quality. He had an extraordinary knowledge of pictorial techniques, the subject of his lectures at the School of Fine Arts of San Fernando in Madrid, where he taught since 1932 until his death. He specialised himself in the fresco technique, one in progressively abandoned (desuso) since XVIII century. He first restored all the fresco paintings at the Basílica del Pilar in Zaragoza, ten domes by Goya, González Velázquez and the Bayeu brothers. In 1941, after this great work, he was comissioned by the officials?? (Board of directors) of the Basílica to paint al fresco?? (in the fresco technique) a vault over the main chorus. From here on he would be forever devoted to huge tasks comissioned by the Church as well as by public and governmental institutions: the great dome of the Monument to the Dead in War in Pamplona, the San Isidro ermita in Aranjuez, the whole pictorial decoration of the Holy Spirit Church in Madrid, and the Ateneo Reception Hall in Valencia are among the many walls decorated by Stolz. He was an outstanding drawer, a condition which helped him to sign more than 5000 square meters of fresco painting, along with hundreds of oil canvases until now desperdigados: portraits, costume painting, historical and mithological canvases, still lives and nudes, being women, always elegant and beautiful, his favourite subject. In this thesis all his fresco paintings, and almost four hundred of his canvases and drawings have been catalogued, analysing his work in relation to different influential contemporaneous and past art movements.