Nuevas formas de empresa en el mundo globalizado y sus repercusiones sobre los derechos de los trabajadores
- CALDAS, MIRIAN APARECIDA
- Roberto Fernández Fernández Director/a
- Susana Rodríguez Escanciano Director/a
Universitat de defensa: Universidad de León
Fecha de defensa: 16 de de gener de 2013
- Juan José Fernández Domínguez President
- Beatriz Rodríguez Sanz de Galdeano Secretari/ària
- Ana Isabel Lambelho Costa Vocal
Tipus: Tesi
Resum
El exceso de economicismo e individualismo que acompaña a la globalización hace que los derechos sociales que los trabajadores han conseguido, con grandes esfuerzos y luchas, estén ahora en peligro. La falta de mantenimiento de unas condiciones laborales mínimas es un síntoma de una sociedad más libre económicamente, pero al mismo tiempo más expuesta a la pobreza y a la marginación. La constante búsqueda empresarial por conseguir mayor rentabilidad y competitividad, ha provocado, por un lado, la deslocalización y, por otro, la descentralización. Estos dos fenómenos, a pesar de ser totalmente distintos, presentan el mismo objetivo: disminuir los costes de la empresa para ser más competitiva y, consecuentemente, aumentar los beneficios. La deslocalización ha sido posible debido a la difusión de la información y una mejora en el transporte, frutos, a su vez, de la globalización. Se trata de un fenómeno empresarial donde las organizaciones de países desarrollados deciden desplazar su producción hacia países subdesarrollados o en vías de desarrollo, para lograr su objetivo, a través de una mano de obra más barata y de incentivos fiscales o geográficos, entre otros, proporcionados por el país receptor. Esta opción empresarial, muy atractiva desde el punto de vista de la rentabilidad, produce, por un lado, un avance en el país destino de debido a la inversión extranjera, pero, al mismo tiempo, al ser la normativa menos exigente, los trabajadores están cada vez menos cubiertos por la protección social estatal y por la legislación laboral estándar. Por otro lado, en el antiguo país industrializado se incrementa el desempleo y caen los niveles salariales y el poder adquisitivo. Por otra parte, los cambios en la economía y en la sociedad han llevado a las empresas a replantear su sistema interno de organización empresarial. El ajuste empresarial a las nuevas exigencias en el mercado acaba por perjudicar a la parte más débil, desde siempre, de la relación laboral, los trabajadores, y por muchas vueltas que el Derecho del Trabajo ha dado para adaptarse a las nuevas realidades de la sociedad moderna, su objetivo primordial de garantizar derechos mínimos y proteger la integridad del trabajador, se hace a día de hoy todavía más imprescindible, máxime si se tiene en cuenta los retrocesos habidos