Conocimientos, actitudes y práctica clínica del consentimiento informado en bloque quirúrgico en el área de salud de Soria

  1. GARCIA HUERTA, MARGARITA
unter der Leitung von:
  1. Valentín del Villar Sordo Doktorvater

Universität der Verteidigung: Universidad de Valladolid

Fecha de defensa: 08 von Februar von 2016

Gericht:
  1. Juan Carlos Martín Escudero Präsident
  2. José Luis Pérez Castrillón Sekretär
  3. Juan Manuel Casas Fernández de Tejerina Vocal
  4. Javier del Pino Montes Vocal
  5. Juan Antonio Juanes Méndez Vocal

Art: Dissertation

Zusammenfassung

INTRODUCCIÓN El consentimiento informado es un diálogo que se establece entre el médico y el paciente, mediante el cual el médico le va a transmitir al paciente la información necesaria para tomar una decisión sobre su plan terapéutico (riesgos, beneficios y terapias alternativas) de forma gradual, veraz y adaptadas a sus necesidades culturales y sociales. Este concepto tal cual se entiende hoy en día ha evolucionado a lo largo de la historia, desde el paternalismo clásico en favor del principio de autonomía o autodeterminación, lo que ha sido debido a la irrupción de la justicia en este campo para defensa de los derechos de los pacientes. Este trabajo se lleva a cabo en el área quirúrgica, y hay que tener en cuenta que el paciente quirúrgico es un enfermo especial, ya que en un breve espacio de tiempo, tiene que enfrentarse a dos procesos complementarios: quirúrgico y anestésico. MATERIAL Y MÉTODOS Se lleva a cabo un estudio transversal, prospectivo, descriptivo y observacional en el Hospital Santa Bárbara de Soria, mediante una encuesta de respuesta de opinión cerrada. Se valora la opinión de médicos y de pacientes. Las variables recogidas son sociodemográficas, conocimientos éticos y legales, test de Picker, escala de ansiedad e información preoperatoria de Amsterdam, escala de satisfacción y test de capacidad Mac Cat T. Criterios de inclusión de médicos: voluntariedad y consentimiento. Criterios de exclusión de médicos: negativa a participar. Criterios de inclusión de pacientes: voluntariedad, consentimiento e intervención programada. Criterios de exclusión: menores de 16 años, cirugía de urgencias, negativa a participar, discapacidad, preso y cuando la no intervención suponga un riesgo para la salud pública. El tamaño muestral para médicos es de 61 facultativos y para pacientes de 186. El método estadístico se basa en un muestreo no probabilístico consecutivo, análisis univariado y multivariante (regresión logística). La estrategia de búsqueda se realiza en bases bibliográficas de la Biblioteca Nacional de EE.UU., Biblioteca Cochrane Plus y Clinical Key. Palabras clave: Ethics, bioethics, informed consent, surgery, patient satisfaction, doctor satisfaction, decision making, physician patient communication, information sheet, patient consent. Operadores booleanos: AND, OR, NOT. El estudio piloto se lleva a cabo con el 20% de la muestra. RESULTADOS El grado de conocimiento ético – legal sobre el C.I. de los médicos es bueno en el 65,6%. Los médicos entre 27 y 49 años, obtienen una puntuación más alta (p = 0,039), no concordante con una mayor satisfacción del paciente, ni del médico. Los factores que más influyen en tener un buen conocimiento ético – legal del C.I. en los médicos son (p < 0,05), realizar actividad docente e investigadora, haber recibido cursos de ética médica y la influencia de un profesional con conocimientos éticos. El grado de conocimiento ético – legal sobre el C.I. es inadecuado en el 77,4% pacientes. Los pacientes entre 19 y 61 años (p < 0,001), con un nivel alto de estudios (p < 0,001) y buena comprensión lectora (p < 0,001) poseen un conocimiento adecuado. Los facultativos (95,1%) reconocen como elementos básicos del C.I.: comprensión, voluntariedad, información y competencia. El 93,5% considera necesario obtener el C.I. después de haber informado de manera gradual y adaptada a las necesidades del paciente. El 83,6% respeta la voluntad de no información, descendiendo a 62,3% en referencia al “privilegio terapéutico”. El 70,5% no dispone de tiempo. El 75,80% de los pacientes apreció claridad en la comunicación pero el 79% no ha querido tener una participación más activa, confiando en el facultativo. Las condiciones de información fueron buenas, aunque el 21,5% desea tener más información sobre signos de alarma y un 20,5% reconoce falta de atención analgésica postoperatoria. La calidad de la relación médico – paciente fue buena y respetuosa en el 95,7% (p < 0,05). Los resultados de la cirugía preocupan más que la anestesia a los pacientes. La muestra tiene unos niveles de ansiedad e información bajos. La ansiedad se incrementa, aumentando con ello la demanda de información (p < 0,05), si el paciente no obtiene respuestas claras por parte del personal hospitalario en lo referente a calmar su dolor y a la información de signos de alarma (p < 0,05) o si aprecia contradicciones (p < 0,05). En la escala de empatía de Jefferson el 50,8% de médicos tiene un nivel alto y la otra mitad, un nivel bajo – medio. El 33,3% de los pacientes revelan un alto nivel de empatía en su facultativo. Los médicos con un alto nivel de empatía tienen adecuados conocimientos ético – legales sobre el C.I. (p < 0,05), pero no más satisfacción por su trabajo. El nivel de satisfacción laboral de los médicos es clasificada de tipo medio, siendo la relación con los compañeros de un nivel de calidad alto (59%). El 81,7% tiene una excelente capacidad medida en el test MacCat - T. Las habilidades mejor puntuadas son la apreciación y elección de un tratamiento. El paciente anciano con comorbilidad, y bajo nivel de estudios y de comprensión lectora, conoce menos sus derechos como paciente y tiene menos interés sobre el C.I. CONCLUSIONES La figura del médico sigue siendo la que debe tomar las decisiones y, en consecuencia, otorgan gran importancia a la confianza / empatía que les inspira. No obstante, quieren recibir información adaptada y gradual sobre su enfermedad. El 91,8% de los médicos entrega el documento del C.I. por razones legales o por protocolo y el 96,3% de los pacientes, lo considera una medida de protección legal para el médico. La satisfacción global de los pacientes es alta; el 82,8% de los pacientes está muy satisfecho o satisfecho con la atención recibida, aspecto no relacionado con un mayor conocimiento del C.I. por parte de los pacientes ni los médicos. Depende de la empatía con la que el personal hospitalario les atienda (p < 0,05), y de la claridad (p < 0,05) de la información transmitida. Los pacientes consideran importante poder expresar sus miedos o preocupaciones (p < 0,05), y creen que participar en la toma de decisiones genera desconfianza de la atención médica (p < 0,05) y disminuye su grado de satisfacción.