Efectos del sistema laboreo sobre las propiedades y calidad del suelo, dinámica del agua de riego y producción del cultivo de maíz

  1. RODRIGUEZ BRAGADO, LAURA
Dirigida por:
  1. Mercedes Sánchez Báscones Directora
  2. Aurora Sombrero Sacristán Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad de Valladolid

Fecha de defensa: 25 de enero de 2016

Tribunal:
  1. Luis Manuel Navas Gracia Presidente
  2. Jesús Martín Gil Secretario
  3. Grégory Kalflèche Vocal
  4. José Luis Tenorio Pasamón Vocal
Departamento:
  1. Ciencias Agroforestales

Tipo: Tesis

Teseo: 501578 DIALNET

Resumen

El sistema de laboreo afectó de forma significativa (P<0.05) a la biomasa vegetal en las campañas 2012 y 2013 (Figura 33). Además, la interacción por años fue también significativa ya que los sistemas de laboreo se comportaron de forma diferente en cada campaña. La biomasa vegetal por hectárea fue superior en la campaña de 2012. El en ambos casos, el sistema de NL aportó una mayor cantidad de biomasa, que superó en 5000kgha-1 al de LC. Esto pudo deberse a un posible estrés hídrico en periodos críticos de crecimiento del cultivo en el sistema de LC, que redujo la captura de recursos necesarios para el desarrollo de la planta, como la intercepción de la luz solar y su conversión a energía química (Russell, 1991). En las parcelas de NL, la mejora de la estructura edáfica hizo que la retención de agua en el perfil del suelo fuera temporalmente estable, evitando el estrés hídrico de la planta y retrasando el secado de la misma al final de la campaña. Numerosos autores como Al-Darby (1987), Das (2015) y Pittelkow (2015) coincidieron en que el sistema de NL produjo una mayor cantidad de biomasa vegetal durante el desarrollo del cultivo. La humedad de la biomasa fue superior en NL, aunque estas diferencias entre sistemas de laboreo no fueron significativas, como tampoco lo fue el efecto del sistema de laboreo sobre el índice de cosecha (relación entre el rendimiento del cultivo y la biomasa vegetal). Los resultados de la cosecha mecánica mostraron que el rendimiento del cultivo de maíz se vio influido, por el factor sistema de laboreo (P<0.05) en la campaña 2013, donde el sistema de NL presentó un rendimiento superior al de LC. En 2012 no se observaron diferencias significativas. El aumento del rendimiento de maíz en NL se pudo deber al mantenimiento y mejora de la estructura edáfica, que permitió retener la humedad en el suelo durante más tiempo que el LC, hecho que permite un mejor desarrollo de la planta y llenado del grano, traduciéndose en una mayor producción. Estos resultados coinciden con los obtenidos por Hussain (1999); Brito Melo (2011); Vieira (2013) y Thierfelder (2015) los cuales ensayaron los sistemas de no laboreo y mínimo laboreo en maíz, obteniendo rendimientos de grano favorables en los sistemas conservacionistas en comparación con el convencional. Sin embargo, los resultados de este estudio no coinciden con los publicados por otros autores como Sheu (1991); en China y Al-kaisi (2004), en un estudio de 20 años en seis localidades en Iowa, EEUU; los cuales observaron que el sistema de NL obtuvo un rendimiento en grano inferior al de LC, si bien es cierto, estos autores concretaron que la productividad económica final del cultivo fue mayor en NL, debido al ahorro de costes y tiempo. Otros autores como Obalum (2011) concluyeron que el sistema de laboreo no afectó de forma significativa a la producción de maíz