Los concejos de realengo y la administración territorial en Castilla y Leónpoder y sociedad en el reinado de Alfonso X (1252-1284)
- Pascual Martínez Sopena Director
- Fernando Arias Guillén Codirector
Universidad de defensa: Universidad de Valladolid
Fecha de defensa: 05 de junio de 2020
- Carlos Manuel Reglero de la Fuente Presidente
- Ana María Rodríguez López Secretario/a
- Manuel García Fernández Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
Este trabajo de investigación ha tenido el objetivo de estudiar y analizar las relaciones de poder existentes entre la monarquía del rey Alfonso X “el Sabio” (1252-1284) y los concejos de realengo que ocupaban el espacio entre la Cordillera Cantábrica y el río Tajo, en los territorios históricos de Castilla, León y la Extremadura. Para ello, el foco se ha situado en un análisis sobre la administración, el poder y la sociedad en el reinado de Alfonso X, buscando elementos novedosos de cara a una nueva reinterpretación del mismo. El estudio de las ciudades y el territorio ofrece nuevas perspectivas y matiza interpretaciones anteriores, pues las reformas alfonsíes supusieron una importante innovación respecto al período anterior. En la primera parte de la tesis trata sobre el espacio, entendido éste de forma amplia no sólo como la geografía en la que se sitúan los concejos estudiados, sino sobre todo a analizar y detallar sus formas de organización social. Se abordan los procesos de reorganización del realengo por parte de la monarquía a través diversos instrumentos, como la política foral o nuevos modelos de ordenación del territorio. Así, al final del período se puede constatar la cristalización de las nuevas realidad territoriales tras un siglo de evolución, que se organizarán políticamente en las llamadas Hermandades. En la segunda parte se abordan los medios empleados por el monarca para el control y gestión del territorio, a través de la administración territorial y los "hombres del rey". El aparato administrativo se dividía en dos niveles, uno regional conformado por las Merindades Mayores y Adelantamientos de Castilla y León, y otro inferior a nivel local en el que actuaban los merinos menores y los jueces reales. En un nivel intermedio se situaban los "alcaldes del rey", además de agentes reales de diversa índole. Estos niveles fueron objeto de diversas reformas entre los años 1255 y 1274, procurando expandir la monarquía su jurisdicción a través de la intensificación del desarrollo de la administración real, no sin resistencias por parte de los poderes locales. El proceso de cambio fue cualitativo, a través de cambios institucionales, y también cuantitativo, con la expansión de la red de agentes reales, que supuso un mayor control del territorio a través de la administración. El monarca no puede considerarse únicamente como “rey que miraba las estrellas” o “un nuevo Justiniano”, sino que persiguió decididamente la traslación a la práctica de sus ideales sobre monarquía y gobierno de códices alfonsíes. A pesar de las dificultades y retrocesos, el poder real siguió creciendo entre 1254 y 1282, y con ello la tensión generada por su control. El período se puede caracterizar por la tensión entre el crecimiento progresivo del poder real y el apoyo o reacción del resto de actores políticos al integrarse en los cambios del sistema, entre los cuales los concejos de realengo ocupan un papel de primer nivel.