La Tahona de UclésArqueología del cementerio de un campo de concentración de la postguerra
- Mora Urdá, Angel
- Ángel Fuentes Zuzendaria
Defentsa unibertsitatea: Universidad Autónoma de Madrid
Fecha de defensa: 2017(e)ko iraila-(a)k 29
- Germán Delibes de Castro Presidentea
- Juan Blánquez Pérez Idazkaria
- Rafael Garrido Pena Kidea
Mota: Tesia
Laburpena
En la localidad conquense de Uclés se encuentra desde el siglo XVI, un monasterio de los más conocidos en la arquitectura renacentista y barroca española. Durante la Guerra Civil el Monasterio de Uclés es evacuado y convertido en hospital de sangre, primero de las brigadas internacionales y posteriormente del IV Cuerpo del Ejército Popular de la República. Acabada la guerra el monasterio fue reconvertido en cárcel de partido e inmediatamente puesto a disposición del proceso de persecución política denominado Causa General. En torno a unas 5000 personas, la mayoría conquenses pasaron por aquí como presos políticos entre 1940 y 1942, en lo que fue un auténtico campo de concentración. Durante la fase de Hospital se acondicionó una zona conocida como "La Tahona" como improvisado cementerio con fosas colectivas de emergencia. Durante los años de prisión se cerró dicho recinto aprovechando su nula visibilidad desde el pueblo para seguir utilizándolo como cementerio a la vez que se dividía en sectores dependiendo del carácter católico o no (o la condición de haber confesado antes de la muerte) del fallecido. Tras las tareas de excavación arqueológica llevadas a cabo entre 2005 y 2007, fueron excavadas 265 fosas, las cuales contenían un total de 429 individuos. Se pueden distinguir tres zonas bien diferenciadas según la modalidad de enterramiento, la causa de la muerte y la persona a la que estaba destinada. El Sector I corresponde a la fase de Hospital con fallecidos por heridas de guerra o enfermedades derivadas, caracterizado por zanjas de emergencia de gran tamaño a su vez subdivididas en fosas de tamaño unipersonal a veces con individuos superpuestos. El Sector II está formado en su mayoría por fosas colectivas o comunes, sin organización aparente, albergando individuos que han fallecido por causas violentas (fusilamientos). El Sector III estaba destinado tanto para fusilados como para fallecidos por causas derivadas de las condiciones de vida, alimentación y sanitarias en las que se encontraban los prisioneros. Este último sector presenta una mayor organización y distribución de los enterramientos, siendo la mayoría individuales y presentado en el caso de los católicos o confesos ataúdes de madera. La arqueología de los Derechos Humanos desde el 2000 ha adquirido en España un desarrollo excepcional debido a las intervenciones realizadas en exhumación de fosas. Básicamente el objetivo de las mismas es devolver los restos a los familiares en un acto de desagravio y de normalización social, que ha resultado imprescindible en la España actual. Pero el caso de Uclés es diferente al tratarse de una fosa no solamente de fusilados o muertos en la represión, además de los milicianos y soldados republicanos, sino que es un lugar específico de internamiento, castigo, represión, etc. Por lo tanto, esta investigación aúna toda la información documental y testimonial junto con la puramente arqueológica para reformular el discurso y aportar nueva información sobre los acontecimientos históricos ocurridos en el Monasterio de Uclés durante la Guerra Civil española y la posguerra.