El marco internacional, comparado y español de la pena de cadena perpetua

  1. Alonso Sandoval, Tomás Cristóbal
Dirigida por:
  1. Ana Manero Salvador Director/a
  2. Florabel Quispe Remón Director/a

Universidad de defensa: Universidad Carlos III de Madrid

Fecha de defensa: 19 de noviembre de 2015

Tribunal:
  1. Luis Alberto Arroyo Zapatero Presidente/a
  2. Carlos R. Fernández Liesa Secretario/a
  3. Javier García Medina Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La pena de cadena perpetua se aplica para los delitos de mayor gravedad y la encontramos en los casos que se sancionaban con la pena de muerte, por ello Savater la denomina como una pena de muerte disfrazada. Lo cierto es que no podemos hablar de la pena de cadena perpetua sin considerar la pena de muerte. La pena de cadena perpetua responde a un desarrollo complejo, ya que su aplicación nació como un sustituto de la pena de muerte. En la actualidad, tal como veremos, muchos países no la regulan con esa denominación, pero si como una pena a perpetuidad o, simplemente, de larga duración, que en la práctica, aunque el penado tenga la posibilidad de salir de prisión, haciendo uso de su libertad condicional, a través de un indulto o el perdón, lo que es casi imposible de obtener-, se convierte en una sanción para toda su vida. La pena de cadena perpetua, es un tema dogmático-filosófico antes que jurídico, por lo que, tenemos que explicar su evolución como parte de la pena de prisión en sí, así como las principales corrientes que justifican su imposición y retomar el debate de si la pena de prisión tiene eficacia o no. Este debate tiene su fundamento en el inicio de la filosofía política, que tomaremos como punto de partida para el desarrollo de las penas privativas de libertad. La presente tesis está estructurada en dos partes, cada una dividida en dos capítulos. En la primera parte, que tiene por título ¿Acerca del nacimiento de la prisión como pena¿, analizaremos la evolución de la pena de privación de la libertad, para entender de dónde viene y hacia dónde se dirige, sus fuentes históricas, así como el desarrollo del castigo y el suplicio, que nos permitirán, no solo justificar sus fines bajo una justificación moral, sino que sus argumentos, que por no ser de juristas, no han sido tomados en cuenta en la explicación social del delito. Esta investigación no solo analiza su desarrollo jurídico, sino que tratamos de ir más allá, de darle un valor dentro de la filosofía del derecho y la política criminal. Analizamos el concepto de la pena de prisión como tal, haciendo énfasis en su evolución histórica, en su desarrollo filosófico-dogmático, en conjunto con la descripción de otros elementos o condiciones, que han modelado la imposición de la pena de prisión más allá de un castigo y a su transformación que ha variado dependiendo de cada momento histórico. Se hace un análisis partiendo de la antigüedad (el concepto del castigo como origen divino), desde el origen pecuniario de la pena, el uso de la venganza, la importancia de la religión, sobre todo en la noción del castigo y su implementación como método de control social, de humillación pública para los delincuentes, etc., hasta la legitimación del monopolio del uso de la fuerza por parte del Estado como un medio para sancionar y eliminar la delincuencia. Tomamos en consideración las principales obras que versan sobre la materia, analizando el contenido jurídico y filosófico que motivó la evolución del castigo hacia la pena de prisión, incluyendo la pena de muerte y la pena de cadena perpetua. Con el objetivo de dar una fundamentación filosófica, y, al mismo tiempo, brindar una referencia histórica y jurídica que permita delimitar el tema, haciendo uso, por un lado, del contenido de las leyes, la regulación de los delitos, de las penas y de su correspondiente ejecución, haciendo énfasis en las instituciones políticas y leyes de la cada época. En el sentido de que, toda privación de la libertad, -y más cuando se trata de una limitación permanente, como la pena de cadena perpetua-, conlleva a una justificación de su legitimación como un fin razonable para proteger a la sociedad y una mejor visión del futuro que considera la resocialización de los presidiarios. Un aspecto que es necesario considerar en toda sanción y que adquiere mayor importancia cuando hablamos de una pena de prisión, es la trascendencia del principio de legalidad, es decir la tipificación exacta del delito y de la sanción, que limiten el grado de discrecionalidad o margen de apreciación del juez para condenar, en el sentido de que dicha aplicación debe cumplir con los requisitos exactamente consagrados en la ley, así como la consideración de las garantías fundamentales del individuo, que orientan con mayor justicia la aplicación del castigo por el delito cometido. Se pretende eliminar cualquier tipo de vaguedad en la tipificación del delito, con miras a establecer un derecho que sea justo en la regulación de las infracciones y en la ejecución de las penas, así como una garantía en contra de las arbitrariedades que puedan surgir del sistema que impone la sanción, la protección de la dignidad humana, la seguridad en la interpretación de los derechos, tanto del infractor como de la víctima. Como punto de partida y su importancia en los fines de la pena, sobre todo en la prevención general y en la culpabilidad jurídico-penal, en conjunto con su aplicabilidad en la normativa española (incluyendo la jurisprudencia del Tribunal Constitucional) y, concretamente, en la ejecución de las penas privativas de libertad, como en sus aspectos en el derecho internacional, en la aplicación de los principales instrumentos internacionales dirigidos a la protección del privado de libertad. Dentro de la segunda parte, que tiene por título ¿La pena de cadena perpetua vista desde el derecho internacional y derecho nacional¿, entramos al debate moderno de la imposición de la pena de cadena perpetua. Sin partir del dilema de si la pena de prisión es necesaria, justificada moralmente o funcional, sino fundamentando su concepto jurídico moderno, describiendo su aplicabilidad en los distintos ordenamientos jurídicos, analizando su desarrollo jurisprudencial, dando diferentes matices, por así decirlo, de lo que constituye su aplicación hoy en día. La aplicación de la pena de cadena perpetua se encuentra en una línea muy delgada, ya que genera violaciónes de los derechos fundamentales de los reclusos o provocar un trato inhumano o degradante.