Mecenas de la modernidad. El encargo arquitectónico como condicionante de la experimentación proyectual

  1. FERNÁNDEZ SALAS, MARÍA ELENA
Dirigida por:
  1. Carlos Ferrater Lambarri Director/a

Universidad de defensa: Universitat Politècnica de Catalunya (UPC)

Fecha de defensa: 05 de diciembre de 2008

Tribunal:
  1. Félix Solaguren-Beascoa de Corral Presidente/a
  2. Maria Rubert de Ventós Secretario/a
  3. Emilio Tuñón Álvarez Vocal
  4. Miquel Planas Rosselló Vocal
  5. Carlos Labarta Aizpún Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 275372 DIALNET

Resumen

Este trabajo presenta una nueva dimensión de la arquitectura, aquella que trasciende la pura materialidad del hecho arquitectónico para descubrirnos la que subyace en la relación que se establece entre la obra y sus usuarios. Con el objeto de evidenciar este hecho, la investigación se centra en aquellas arquitecturas donde este vínculo no solo tiene que ver con el momento de la ocupación de la obra construida, sino que aparece de forma constante a lo largo del desarrollo del proyecto arquitectónico. Con la intención de delimitar todavía más este ámbito, entre las diversas circunstancias externas que conducen, dirigen y condicionan el momento de la concepción arquitectónica, el trabajo centra su atención en aquella que tiene que ver con la presencia del personaje que posibilita el encargo arquitectónico -'el cliente'- y, específicamente, en aquella categoría que lo convierte en el usuario final de la obra arquitectónica, en definitiva, en 'el habitante'. Con esta criba, la investigación se focaliza en aquellos encargos domésticos que, condicionados por la concurrencia de ambos roles, determinaron el trabajo del arquitecto de forma inexorable, al implicar la sustitución de 'la objetividad' inmanente en cualquier programa funcional abstracto por 'la subjetividad' congénita en el programa simbólico y concreto, siempre implícito en este tipo de encargos. Se trata, por lo tanto, de abordar el proyecto doméstico desde una nueva perspectiva, la enmarcada por el encuentro del arquitecto y del habitante, dos personajes destinados a consensuar una forma arquitectónica específica donde uno de ellos deberá habitar. Esta connotación circunscribe también la investigación a su vertiente más experimental, aquella que utilizó el espacio doméstico como laboratorio proyectual de las diferentes tendencias que, partiendo de las vanguardias, condujeron las diferentes arquitecturas desarrolladas en la primera mitad del siglo XX. Este punto de partida justifica la elección de los ejemplos material de este estudio, ya que en todos ellos se constatan dos evidencias que justifican su identificación como 'experimentos': ¿ la primera apunta a la contaminación mutua entre estos dos personajes involucrados en el proyecto arquitectónico, como responsable inequívoco del resultado final de la forma arquitectónica; ¿ la segunda, aunque ahonda también en lo anterior, insiste en justificar el perfil experimental que caracterizó a las obras elegidas desde el uso de programas domésticos poco convencionales que, a pesar de ser enunciados en un principio por el cliente, fueron convertidos por el arquitecto en su mejor herramienta proyectual. A parte de su carácter experimental, todos los ejemplos destacan por ser, además de obras físicas, construcciones mentales de los dos personajes responsables de su existencia. Como tales, además de plantearse como cobijo del cuerpo, fueron refugios del alma de su habitante e hitos que consolidaron profesionalmente a su arquitecto. Si la primera evidencia se justifica desde la simbiosis conseguida entre el objeto y la idiosincrasia particular del encargo, la segunda se ratifica desde el descubrimiento de una nueva metodología proyectual conducida más desde un nivel conceptual que instrumental. De esta manera fue como, transparencia, flexibilidad, continuidad, escisión entre estructura y cerramiento, percepción espacial desde el movimiento, apreciación material desde la contemplación y relación interior- exterior se convirtieron en 'la materia prima' que incentivó la concepción del proyecto moderno, con independencia de la tendencia a la que fuera adscrita la obra que permitió su materialización. Por lo expuesto, este trabajo, además de presentar una nueva óptica con la que entender la modernidad, pretende realojar nuestra inspiración en cada una de estas arquitecturas con el fin de reinventar los nuevos modos del habitar del futuro de la misma forma que ellas inventaron los del pasado: mediante la utopía consensuada entre arquitecto y habitante.