Estudio coste - efectividad del alto flujo frente a la ventilación no invasiva en pacientes con bronquiolitis

  1. Gutiérrez Moreno, Miriam
Dirigida por:
  1. Carlos Ochoa Sangrador Director/a
  2. Pablo del Villar Guerra Codirector
  3. Alberto Medina Villanueva Codirector/a
  4. Isabel San José Crespo Directora

Universidad de defensa: Universidad de Valladolid

Fecha de defensa: 16 de diciembre de 2022

Tribunal:
  1. Susana Beatriz Reyes Domínguez Presidente/a
  2. Juan Pablo García Íñiguez Secretario/a
  3. Olga de la Serna Blázquez Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La patología respiratoria durante la edad infantil constituye la causa más frecuente de ingreso hospitalario en la actualidad. Dentro de la patología respiratoria, una de las más prevalentes es la bronquiolitis que supone el grueso de ingresos en época invernal, lo que produce un aumento de la presión asistencial en esos meses debido a la necesidad de proporcionar soporte respiratorio a estos pacientes (aproximadamente uno de cada tres niños desarrollarán clínica de bronquiolitis y en el primer año de vida entre el 2-3% precisarán hospitalización, según datos del National Institute for Health and Care Excellence del Departamento de Salud del Reino Unido [NICE]). Entre el 3-11% de los pacientes requieren asistencia en una unidad de críticos por tanto es una patología que consume muchos recursos en época epidémica a pesar de su baja mortalidad. A pesar de su frecuencia y el consumo elevado de recursos, existen aún grandes controversias en cuanto al manejo más adecuado6. El tratamiento farmacológico sigue sin estar claro actualmente, ya que la mayoría de tratamientos probados no han demostrado eficacia con un alto grado de evidencia. El manejo médico en la actualidad se basa en las medidas de soporte general y respiratorio, que puede ir desde oxigenoterapia convencional en gafas nasales a bajo flujo a ventilación no invasiva (VNI), soporte con ventilación mecánica convencional (VMC) u oxigenoterapia de alto flujo (OAF), tratamiento incorporado en la última década. Con la OAF se aporta un flujo de oxígeno, solo o mezclado con aire, superior a la demanda del paciente de aire (flujos de 1-8 L/min en lactantes o desde 5 a 40 L/min en la población adulta) con dispositivos diseñados específicos como el de Fisher & Paykel®, Vapotherm® o Wilamed®, con una mezcla de aire y oxígeno humidificado (casi al 100%) y calentado (entre 34-37ºC) a través de unas cánulas nasales especiales de diferente tamaño, según los flujos empleados. Todavía no existe evidencia suficiente que haya establecido su eficacia y eficiencia, ni sus indicaciones concretas, en la bronquiolitis aguda. Sin embargo su uso está generalizándose, tanto en servicios de urgencias como en salas de hospitalización. El objetivo de nuestro trabajo ha sido describir las diferencias en cuanto al número de traslados a una Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos (UCIP), días de oxigenoterapia, número de reingresos y tratamientos farmacológicos utilizados en pacientes con bronquiolitis aguda ingresados en un hospital de segundo nivel en dos períodos, diferenciados en función de la disponibilidad o no de OAF. Se completa la presente tesis doctoral realizando un estudio a tres bandas para una valoración más completa de la OAF. Para ello, se lleva a cabo una revisión sistemática y cálculo de metanálisis en red de los diferentes estudios publicados. Se revisan mediante una cohorte histórica de un hospital de segundo nivel cómo se lleva a cabo la OAF, así como la valoración del riesgo de ingreso en intensivos, mayor necesidad de VMC en comparación con la OC y la VNi. Además se realiza un análisis pormenorizado tipo coste - efectivo comparando el soporte con OAF y el resto de terapias.