Abordaje multidisciplinar del paciente con hemorragia subaracnoidea.

  1. María Egea Auría 1
  2. Patricia García Lucas 2
  3. Silvia Gran Embid 3
  4. Eva Monge Pelegrín 4
  5. Nuria Garín Portero 5
  6. Gloria Cucalón Leciñena 6
  1. 1 Graduada en Enfermería por la Universidad de Zaragoza. Máster en Gerontología Social. Centro de Salud Parque Goya (Zaragoza, España).
  2. 2 Graduada en Enfermería por la Universidad de Zaragoza. Máster en Gerontología Social. Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza, España).
  3. 3 Diplomada en Fisioterapia y Graduada en Enfermería por la Universidad de Zaragoza. Máster en Gerontología Social y Máster en Osteopatía Estructural. Centro de Salud de Borja (Zaragoza, España).
  4. 4 Diplomada en Fisioterapia por la Universidad de Zaragoza. Máster en Osteopatía Estructural. Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza, España).
  5. 5 Diplomada en Fisioterapia por la Universidad de Zaragoza. Máster en Terapia Manual Ortopédica. Centro de Salud María de Huerva (Zaragoza, España).
  6. 6 Graduada en Enfermería por la Universidad de Zaragoza. Máster en Biología Molecular y Biomedicina. Centro de Salud Valdespartera (Zaragoza, España).
Revista:
Revista Sanitaria de Investigación

ISSN: 2660-7085

Año de publicación: 2021

Volumen: 2

Número: 9

Tipo: Artículo

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Resumen

La hemorragia subaracnoidea (HSA) se define como la presencia de sangre en el espacio subaracnoideo y en las cisternas de la base. La mayor parte de las hemorragias subaracnoideas están causadas por la rotura de aneurismas intracraneales. A veces estos aneurismas se rompen debido a esfuerzos como el parto o la defecación y se produce un sangrado. La prueba inicial que se realiza cuando existe una sospecha de HSA es un TAC craneal. Si el resultado del TAC es normal, se debe llevar a cabo una punción lumbar para detectar si existe presencia o no de xantocromía. Se realizó un estudio descriptivo, del tipo estudio de caso, con abordaje cuantitativo y cualitativo. Se buscó describir el caso clínico de una paciente de 42 años que acudió al centro de atención primaria por una cefalea hemicraneal izquierda muy intensa localizada en la zona occipital de comienzo brusco tras defecar. Después de varias pruebas, la paciente fue diagnosticada de una hemorragia subaracnoidea. La prueba diagnóstica definitiva fue la punción lumbar. Ante una cefalea aguda de instauración tan brusca tras un esfuerzo siempre debemos sospechar de una lesión hemorrágica cerebral. Nunca debemos descartar un proceso hemorrágico con un TAC normal, ya que a veces son necesarias otras pruebas para establecer el diagnóstico de hemorragia subaracnoidea.