La dimensión teológica de las imágenes sagradas en Juan Damasceno durante la controversia iconoclasta

  1. Pinazo Pinazo, Juan Manuel
Dirigida por:
  1. Raúl Caballero Sánchez Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Málaga

Fecha de defensa: 15 de diciembre de 2023

Tribunal:
  1. Juan Signes Codoñer Presidente
  2. Emanuela Fogliadini Secretario/a
  3. Ernesto Sergio Mainoldi Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 829141 DIALNET lock_openTESEO editor

Resumen

La 'Edad de la Iconoclasia' ha sido objeto de análisis durante mucho tiempo por su fascinación para la investigación histórica. Este periodo ha sido caracterizado como uno de los fenómenos más complicados e interesantes no sólo de la historia de Bizancio, sino también de la propia historia del cristianismo. Esta fascinación a la que hemos aludido responde, entre otras razones, a las incógnitas que rodean a este periodo y que no han sido plenamente resueltas. Señalamos dos razones: por un lado, la constante revisión a la que se han visto sometidas las teorías con las que se ha abordado este fenómeno en los últimos estudios y, por otro, la reinterpretación de las fuentes a la luz de perspectivas más amplias, dando lugar a los planteamientos antes mencionados. Debido a la complejidad que rodea este proceso histórico que representó un periodo de formación y transformación para la civilización y la cultura romanas orientales, los historiadores que se han ocupado de esta etapa siguen discrepando sobre la naturaleza precisa de dicha transformación. La razón principal radica en la afirmación de algunos de los especialistas de que la iconoclasia bizantina siempre estuvo envuelta en una "membrana casi impenetrable de actitudes y supuestos", muchos de ellos contradictorios.La facción que salió victoriosa de la crisis, los partidarios de las imágenes religiosas, modeló la percepción histórica de su pasado de tal manera que lo convirtió en un tema dominante para las generaciones bizantinas posteriores y, por tanto, para los historiadores modernos que dependen en primera instancia del registro escrito desde el punto de vista más o menos distorsionado de quienes ganaron la disputa.Derivado del primer problema en el tratamiento de las fuentes bizantinas, a saber, ese tratamiento unilateral y reelaborado del periodo iconoclasta tras el "Triunfo de la Ortodoxia" en 843, nos encontramos con un segundo obstáculo, la práctica ausencia de literatura producida por los iconoclastas, resultado de una inmediata y definitiva damnatio memoriae que habría sido impuesta por la segunda Nicena del año 787. Ante esta problemática en las fuentes, la pregunta que ocupa el panorama de la investigación es: ¿cómo analizar este hecho histórico y qué metodología seguir sin cometer los errores atribuidos a la historiografía tradicional, como confundir el síntoma con la causa respecto a la complejidad que entraña este proceso histórico, o aplicar concepciones ligadas a los intereses de cada época? La polémica iconoclasta responde a un complicado trasfondo que presumiblemente se remonta a finales del siglo VI y que llevó a Bizancio a definirse paulatinamente desde una doble perspectiva interconectada: la revisión de su pasado y la búsqueda de nuevas explicaciones para un mundo que cambiaba drásticamente a la luz de los acontecimientos del siglo VII: las invasiones persas y, sobre todo, las conquistas árabes.Desde esta doble perspectiva, relacionada entre sí, señalamos las mutaciones que se generaron en los distintos estratos de la vida en el Mediterráneo oriental durante la Antigüedad Tardía: cambios en la percepción del pasado y formas de adaptación a las nuevas necesidades contemporáneas. El enfoque que pretendemos seguir para nuestra tesis se estructura en torno a dos comentarios o lecturas sobre los inicios de la iconoclasia: el histórico y el teológico. En el primero, abordamos los acontecimientos clave que marcaron las reformas de los emperadores isaúricos durante el siglo VIII.En el segundo, analizamos el factor teológico y su impacto en la evolución del fenómeno histórico. Sobre estos dos pilares, construimos nuestro marco argumentativo. Para ello, proponemos una exposición de los resultados a los que nos ha conducido el análisis de las fuentes primarias y su interpretación por parte de los bizantinistas. Ello no implica una lectura preconcebida de la poliédrica cuestión de la iconoclasia, sino la presentación de los hechos que estimamos necesarios, considerando si, por un lado, la etiología del fenómeno responde al principio del cui prodest con el que influyentes estudiosos han abordado conjuntamente la iconoclasia y, por otro, cómo se articularon los mecanismos para el fin último de la controversia según las interpretaciones ofrecidas. Este fin, en principio, requería la identificación y legitimación de la ortodoxia cristiana mediante un concepto constantemente repetido en las fuentes bizantinas: "la verdad", es decir, ¿qué significaba ser verdaderamente ortodoxo? Imponer "la verdad" y excluir lo contrario implicaba aclarar primero dos términos controvertidos presentes en la Controversia: kainotomía (novedad) y paradosis (tradición). Las Orationes pro sacris imaginibus, la obra apologética sobre los iconos de Juan Damasceno, han sido objeto de debate en cuanto a su ubicación, tanto cronológica como en el contexto preciso de la controversia. Mediante un análisis del contexto teológico y cultural de las homilías de Damasceno, nos proponemos arrojar luz sobre el problema cronológico, situando los tres Discursos durante el reinado de Constantino V en respuesta a sus Cuestiones teológicas (Peuseis) contra los iconos, y no al comienzo de la controversia como reacción a la iconoclasia supuestamente ferviente de León III, una contextualización de su obra más acorde con los debates teológicos sobre las imágenes de la época.