Particularidades técnicas del tratamiento endovascular en población adulta y pediátrica con ictus isquémico agudo

  1. PARRA FARIÑAS, MARIA DEL CARMEN
Zuzendaria:
  1. Marc Ribó Jacobi Zuzendaria

Defentsa unibertsitatea: Universitat Autònoma de Barcelona

Fecha de defensa: 2022(e)ko apirila-(a)k 04

Epaimahaia:
  1. Albert Selva O'Callaghan Presidentea
  2. Juan Francisco Arenillas Lara Idazkaria
  3. Mikel Terceño Izaga Kidea

Mota: Tesia

Teseo: 821963 DIALNET lock_openTDX editor

Laburpena

El tratamiento endovascular del ictus isquémico agudo ha supuesto un impacto inigualable en los resultados funcionales de estos pacientes. Los avances en las técnicas, materiales y dispositivos han ido a la par con los conocimientos que se han ido adquiriendo por el personal sanitario en los últimos años. A pesar de estos avances existen diversos problemas, dificultades o contrariedades en el tratamiento endovascular de esta patología. Para ayudar a resolver algunos de estos dilemas realizamos un estudio de cohortes prospectivo en el que nos planteamos analizar los resultados clínicos y radiológicos de los pacientes con complicaciones arteriales intraprocedimiento (CAI), el efecto de la alteplasa sistémica combinada con la trombectomía mecánica (TM) y la efectividad de los distintos dispositivos de recanalización endovascular de tercera generación. Así mismo, analizamos el perfil de eficacia y seguridad de la TM en pacientes menores de 18 años con ictus isquémico agudo. Las CAI, que afortunadamente ocurren en una pequeña proporción de los pacientes tratados con TM, se asocian con peores resultados clínicos y radiológicos tanto a corto como a largo plazo. Parece que la infusión previa de alteplasa de forma sistémica ayuda al tratamiento endovascular reduciendo la duración del procedimiento, aumentando la tasa de recanalización completa y de independencia funcional. No parece que haya diferencias entre los diferentes modelos de stentrievers existentes en el mercado. Parece que la TM es una técnica segura y eficaz en pacientes menores de 18 años con ictus isquémico agudo y discordancia clínico-radiológica. Especialmente en pacientes adolescentes que cumplen criterios clínicos y radiológicos similares a los dictados en las guías internacionales estandarizadas de tratamiento para adultos.