Ética del cuidadodignidad y autonomía en la toma de decisiones

Resumen

Cuidar es atender y preocuparse por las necesidades de ayuda de personas en situación de dependencia. El cuidado implica desarrollar una serie de actitudes que van más allá de ejecutar determinadas tareas de asistencia o control; implica también afecto, acompañamiento, respeto y empatía con la persona a cuidar. Como dice Victoria Camps (2021) los cuidados presentan una vertiente relacional asimétrica basada en la reciprocidad, solidaridad e intercambio. Hablar de ética del cuidado es atender a aspectos que proporcionen seguridad, tranquilidad, ayuda, compañía y afecto a las personas atendidas. La ética del cuidado exige flexibilidad, adaptación a los contextos y actuación desde circunstancias de cada persona. "La ética del cuidado en una democracia es una ética del reparto de responsabilidades". El papel de apoyo y el tiempo dedicado por las/los cuidadores es una tarea insuficientemente reconocida por la sociedad. En palabras de Mª Ángeles Durán los cuidados no parece que hayan entrado en el catálogo de las ocupaciones laborales, porque es muy difícil establecer el valor económico que supone el trabajo realizado, medido en tiempos de dedicación.